Unos de los factores que determinan la edad que tenemos es fijarnos en nuestras manos ya que son especialmente sensibles a los estragos del paso del tiempo. Pero no siempre su aspecto es totalmente determinante de este factor.
Por una razón u otra, tarde o temprano comenzamos a sufrir de sequedad en manos y por consiguiente, de esas arrugas tan antiestéticas que delatan un envejecimiento de la piel que no es real. Tratar las manos secas y arrugadas está al alcance de todos hoy en día, con un poco de voluntad y perseverancia se pueden evitar los estragos del frío y también de la edad.
¿Cómo evitarlo?
Con actos tan simples y económicos en cuánto a tiempo y dinero como la aplicación de crema hidratante a diario, no abusar de productos químicos directamente sobre nuestras manos, exfoliarlas una vez a la semana ó sumergir las manos en aceite tibio, ya sea de oliva o almendra, y dormir con guantes finos de algodón ayudan a tener unas manos más bonitas e hidratadas.
También podemos realizarnos tratamientos en clínicas de estética como sesiones de mesoterapia, Peelings químico o Biorevitalización mediante láser.